¿Sabías que en los meses de invierno nuestra piel no produce suficiente vitamina D por la falta de luz solar? La vitamina D es esencial para nuestro organismo, ya que ayuda a la absorción de calcio, fortalece las defensas y mejora el estado de ánimo.
La falta de vitamina D en invierno puede provocar problemas de salud como osteoporosis, debilidad muscular y depresión. Para obtener la cantidad necesaria de vitamina D en invierno, no es suficiente con seguir una dieta equilibrada, es necesario exponerse a la luz solar o tomar suplementos de vitamina D.
Puedes obtener vitamina D exponiéndote al sol durante 15-20 minutos al día en las horas de mayor radiación. Otra opción es consumir alimentos ricos en vitamina D como pescados grasos, yema de huevo y leche fortificada. Sin embargo, en muchas ocasiones estas medidas no son suficientes para cubrir las necesidades diarias de vitamina D.
En estos casos, una buena opción es tomar suplementos de vitamina D, siempre bajo recomendación médica. Los suplementos pueden ser muy útiles para prevenir deficiencias, especialmente en personas mayores, bebés y personas con piel oscura o con problemas de absorción de nutrientes.
No esperes a tener síntomas para empezar a cuidar tu ingesta de vitamina D. Mantén una dieta equilibrada y busca la luz solar siempre que puedas, ya que un buen nivel de vitamina D es esencial para mantener una buena salud en invierno.